Último día por Japón, que pena no haberle podido dedicar algún que otro día más porque nos ha encantado este viaje.

Para llegar a Osaka tendremos que volver a hacer el recorrido que hicimos ayer pero en sentido contratio. Cogemos el ferry hasta la estación Miyajimabushi y desde ahí, hasta la estación de Hiroshima. De allí cogimos el shinkansen hasta Osaka.

Llegamos bien entrada la tarde a la ciudad así que dejamos las maletas en el hotel de nuestros amigos (nosotros nos alojaríamos directamente en el aeropuerto, les hablo más detalladamente de nuestro hotel en el post de Alojamientos en Japón).

Como no teníamos muchas horas fuimos directamente a pasear por las calles de Dōtonbori, entre las calles vemos miles de neones y llegamos al más famoso de todos el Glico-man.

Llegamos también al barrio de Shinsekai, con miles de restaurantes y la torre Tsutenkaku al fondo. Finalmente entre unas calles y otras llegamos también al barrio de Namba.

Si disponen de más tiempo que nosotros en esta excéntrica ciudad pueden visitar también: el castillo de Osaka, Isshin-ji temple y shintennoji temple, barrio den den Town, Umeda Sky Building y el distrito financiero.

Hasta aquí llegaban nuestros pasos por el país nipón. Un país que nos había enseñado la gran diversidad que tiene entre cultura y modernidad, entre rascacielos y parajes naturales increíbles. En definitiva, un país que es una pasada y que tienen que visitar sí o sí.

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